Exitosa representante de la cocina francesa

Desde su estancia en Londres la chef paisa, Anita Botero, ha enamorado a centenares de paladares. Entre otras razones por su auténtica pasión por la culinaria, en especial por su debilidad frente a la gastronomía francesa.

Sus fieles clientes en Medellín han encontrado en sus dos restaurantes: La Cafetiere de Anita y Anita’s Gourmet Express, espacios entrañables y asombrosos para disfrutar platos clásicos franceses con toques contemporáneos. Uno de los tantos atributos culinarios que definen a esta paisa simpática y afectuosa.

Ahora bien, su delirio por la cocina no solo lo perciben sus comensales, también su familia, quien tiene el lujo de tener en casa a una de las mejores chefs del país.

Anita confiesa que encuentra en la cocina la excusa perfecta para compartir con su familia y consentir a dos de las personas a quienes más ama, sus hijos María Camila y Pablo.

Dentro de sus planes para el futuro está continuar trabajando en sus restaurantes, en sus clases de cocina y en varios proyectos entre los que se cuenta Ensumesa.com.

¿Cuál es el secreto para ser una maravillosa chef y una excepcional mamá?

La clave está en el apoyo de la familia. Mis hijos están muy involucrados en la cocina, hoy en día, trabajo en mis restaurantes y tengo la posibilidad de estar en la casa cuando mis hijos llegan del colegio.

¿Qué opinan tus hijos que seas una de las chef más reconocidas en Colombia?

Se sienten súper orgullosos.

¿Cuál es la receta de tu autoría que ellos más disfrutan?

Los dos tienen gustos antagónicos. A María Camila le gusta explorar el tema de los quesos y a Pablo le encanta el pulpo y los calamares.

¿Cuál es el plan que más disfrutas hacer en familia?

Cocinar en horno de barro o elaborar un BBQ.

Concluiste la carrera de derecho ¿Por qué terminaste dedicándose a la gastronomía?

Siempre tuve muy claro que quería dedicarme a la gastronomía, pero por circunstancias de la época no podía estudiar cocina, no habían escuelas. Así que, obtuve mi diploma como abogada y empecé a investigar alternativas para madurar la idea de convertirme en chef.

Viajaste a Londres y finalizaste tus estudios en el Cordon Bleu y en el Leith’s School of Food and Wine ¿cómo estas prestigiosas academias te definieron como cocinera?

Soy una convencida de la formación ortodoxa y los métodos clásicos del Cordon Bleu. Ahora bien, me marcó mucho la siguiente experiencia: en las carteleras de la escuela ponían avisos donde solicitaban ayuda en las cocinas para eventos especiales. Trabajaba los viernes en la noche y los sábados en las casas de familias inglesas.

Estas faenas fueron espectaculares porque podía aplicar, perfeccionar conocimientos y conocer gente maravillosa. Incluso, en un hotel boutique tuve la oportunidad de cocinar para el actor estadunidense Kevin Costner.

¿Qué te enamoró de la culinaria francesa?

Que es la madre de todas las cocinas. Patrimonio de la humanidad.

¿Cómo defines tus restaurantes La Cafetiere de Anita y Anita’s Gourmet Express?

La Cafetiere de Anita tiene una orientación meramente francesa. En la carta los comensales encuentran platos clásicos de la cocina francesa con toques contemporáneos.

Anita’s Gourmet Express está dirigido a una clientela que no tiene tiempo para un almuerzo largo. Pueden encontrar sándwiches, ensaladas, otras alternativas saludables y un menú del día.

¿Existe algún plato al que le tengas mucho cariño?

Hay varios, pero en especial a la sopa de tomate a la naranja.

Cuando entras a la cocina ¿cuáles son esos pilares inquebrantables que terminan por definir tu sazón?

El respeto por la materia prima y por el comensal. Siempre me cercioro de tener los mejores ingredientes.

¿Puedes compartirnos un momento que como chef te haya provocado una enorme satisfacción?

Es invaluable ese sentimiento de generarles placer y alegría a las personas a través de la comida. Todos los días me convenzo que comer es uno de los momentos más importantes de la vida.

Llevas años dictando talleres de cocina, especialmente en Medellín ¿cómo surgió esta iniciativa?

Cuando llegué a Colombia de estudiar cocina en Europa, quería buscar la forma de aportarle algo a la gente y me di cuenta que podía hacerlo a través del conocimiento, de la docencia. Un día convoqué a personas con distintas profesiones y oficios; ejecutivos, amas de casa, empleadas domésticas, etc. Y desde el primer taller supe que esta era la vía para transmitir cultura gastronómica.

¿En qué consisten tus clases?

Les enseño a mis alumnos a conocer los ingredientes, términos culinarios, técnicas de cocción, a comer y disfrutar cosas distintas. Las clases de cocina me obligan a estar actualizada y a estudiar todo el tiempo. No hay que olvidar que la gastronomía es un arte que nunca deja de evolucionar.

¿Recuerdas una anécdota especial como maestra de cocina?

No hay un momento único. Todas las clases son especiales.

¿Por qué decidiste formar parte de la comunidad de Ensumesa.com?

Me identifico cien por ciento con el portal, con su filosofía y profesionalismo.

¿Sueñas con prepararle un plato a alguna personalidad?

No. Todos mis comensales son importantes.

¿Cuál es tu plato paisa preferido?

El sancocho.

¿Un ingrediente indispensable?

La sal.

¿El aroma que la inspira?

El ajo.