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Los espárragos verdes son tallos jóvenes y tiernos de la esparraguera, una planta herbácea formada por tallos aéreos ramificados y una parte subterránea de raíces y yemas. Nativa del Mediterráneo, la esparraguera crece hoy en zonas templadas de todo el mundo. Sus principales productores son Italia, Francia y Alemania. Los espárragos verdes se diferencian de las variedades blancas y moradas por su sabor, que es más pronunciado.
Los espárragos verdes se preparan más que todo al vapor y bañados en salsa. También pueden asarse a la parrilla, al horno, a la brasa, o bien sofreírse o cocinarse a fuego lento. Úselos en tartas, cremas y sopas. Justo antes de la cocción, corte los extremos duros de los tallos y pélelos hasta donde comienzan las puntas.
Los espárragos se encuentran en mercados y supermercados. Escoja tallos frescos, rectos y firmes, cuyo extremo cortado luzca limpio. Asegúrese de que tengan las puntas cerradas y compactas. Rechace aquellos con magulladuras y manchas.
Consúmalos lo más pronto posible o guárdelos en la nevera, envueltos en un paño húmedo.