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Otros nombres: Setas portobello, champiñones portobello
El hongo portobello, pariente del champiñón blanco, es una variedad deliciosa y muy apreciada por los cocineros. Es grande, carnoso, terso y de pulpa firme. Tiene un sabor pleno, dulce y fresco. Su gran sombrero es marrón y su interior blanco y limpio. Por su presentación y propiedades, se ha ganado en muchas cocinas la denominación de hongo exótico.
Su generoso tamaño los convierte en el sustituto perfecto de la carne en hamburguesas y los hace ideales para asar a la parrilla. Agréguelos a ensaladas y úselos en guisos, salsas, sopas y cremas. También los puede rellenar o conseguirlos secos para hidratarlos al momento de su uso, idealmente con té verde o bien con agua tibia.
Los hongos portobello se encuentran frescos y secos en tiendas y supermercados gourmet. Si los compra frescos, elija aquellos recién cosechados. Para cerciorarse de ello, revise que el extremo cortado no esté duro ni seco. Elija hongos firmes, sin manchas ni grietas. Rechace aquellos de aroma ácido.
Guarde los hongos frescos en la nevera, dentro de una bolsa de papel cerrada.