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El pecorino es un queso curado hecho de leche oveja y originario del sur de Italia. Según el lugar de producción, se encuentra en cuatro variedades: pecorino sardo, de Cerdeña, pecorino romano, pecorino siciliano y pecorino toscano. Estas variedades, a su vez, se sacan al mercado en distintos puntos de maduración. Los más jóvenes, que son los frescos y semicurados, tienen texturas más tiernas y elásticas, y cremosos sabores florales con notas de heno y nuez. Lo más maduros, por su parte, son más duros y quebradizos, y tienen un sabor más fuerte, a mantequilla y nuez, colmado de agradables notas picantes y saladas.
Consuma el pecorino solo, como pasaboca, acompañado de aceitunas o vegetales crudos, o también con frutas y embutidos. Úselo para gratinar risottos, pastas o raviolis.
A la hora de comprar, así los quesos sean frescos, semicurados o maduros, verifique las características de apariencia, textura, olor y sabor, para comprobar que están en buen estado. Compre quesos o porciones bien envueltas.
Conserve los quesos maduros, bien envueltos, en un lugar seco, fresco y protegido de la luz. Refrigere los queso más frescos.