Salsa de tomate
1 cucharada de aceite vegetal
1 cucharada de cebolla larga
1/2 cucharadita de ajo
3/4 de taza de tomate sin semillas ni piel
2 cucharadas de caldo de pollo
1/3 de cucharada de pasta de tomate
Una pizca de comino
Sal y pimienta al gusto

Guarnición
1 plátano maduro en rodajas

Arroz al wok
1 cucharada de aceite vegetal
3 chorizos cortados en rodajas
4 cucharadas de cebolla roja
1 cucharadita de ajo
1/4 de taza de pimentón rojo
1/8 de cucharadita de ají jalapeño finamente picado
1/4 de taza de jugo de naranja
1 taza de calabacín verde cortado en cubos medianos
1 taza de maíz en grano
1 taza de fríjol rojo cocinado
3 tazas de arroz blanco cocinado
Sal al gusto
Pimienta recién molida

1. Precaliente el horno a 350 °F (180 °C). En una sartén mediana, caliente el aceite y fría la cebolla y el ajo finamente picados por 3 minutos. Agregue el tomate y el caldo. Cocine a fuego medio hasta que el tomate se haya disuelto casi en su totalidad. Licue la mezcla hasta obtener una salsa homogénea. Nuevamente ponga la salsa en la sartén. Añada la pasta de tomate, el comino, sal y pimienta. Cocine por 3 minutos más.

2. Ponga en una lata de hornear las rodajas de plátano y hornee por 10 minutos aproximadamente, o hasta que estén cocinadas. En un wok, caliente el aceite. Saltee el chorizo, la cebolla y el ajo finamente picados, el pimentón cortado en cubos pequeños y el ají, de 2 a 3 minutos. Vierta el jugo de naranja, el calabacín y el maíz. Continúe cocinando por 3 minutos más. Agregue los fríjoles y el arroz. Incorpore con cuchara metálica un tercio de taza de la salsa de tomate previamente preparada. Añada sal al gusto. Cocine por 4 minutos más.

3. Sirva el arroz en una bandeja o en cuatro platos hondos. Ponga las rodajas alrededor del arroz y la salsa de tomate restante. Si desea, espolvoree sobre la preparación pimienta recién molida. Sirva.

ENSUMESA LE SUGIERE:

Para preparar este tipo de recetas siempre es importante que el arroz haya sido cocinado con anterioridad y se encuentre frío, pues está más suelto. Si se desea un arroz más asiático, omita la salsa de tomate y reemplácela por salsa de soya.