16 tomates cherry
4 cucharadas de aceite de oliva
2 cucharadas de azúcar moreno
1 diente de ajo finamente picado
8 hojas de orégano fresco
Pimienta negra recién molida
250 g de harina de trigo
3 yemas de huevo
1/2 cucharadita de polvo de hornear
1 pizca de sal
Hojas orégano para decorar

1. Corte los tomates en cruz. Caliente el aceite de oliva a temperatura media-alta, incorpore los tomates y espolvoréelos con azúcar. Con una espátula dé vuelta cuidando que no se desbaraten. Agregue el ajo, el orégano y la pimienta. Al cabo de dos o tres minutos, retire del fuego y reserve.
2. Sobre una superficie de acero mezcle la harina con las yemas, la sal y el polvo de hornear. Amase vigorosamente durante cinco minutos hasta obtener una masa homogénea. Deje reposar la masa tapada con un limpión durante quince minutos.
3. Estire la masa sobre una superficie enharinada y corte varios aros con la ayuda de un molde. Hornee a 180 °C (350 °F) durante diez minutos. Retire los aros del horno y coloque sobre ellos los tomates confitados. Decore con hojas de orégano.