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20 min
25 min
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Esta receta resalta las cualidades de las chatas, un corte magro muy apreciado por su delicioso sabor y versatilidad que resulta ideal para asar a la parrilla y en el horno.
4 Personas
20 min
25 min
500 g de chata de res cortada en cubos medianos
4 panecillos redondos
1 1/2 cucharadas de mostaza
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de cebolla blanca finamente picada
1 cucharadita de ajo finamente picado
4 cucharadas de vino blanco
Sal y pimienta al gusto
Salsa de champiñones y estragón
3 cucharadas de mantequilla
1 cucharada de cebolla blanca finamente picada
2 tazas de champiñones cortados en rodajas
3/4 de taza de vino blanco
3/4 de taza de crema de leche
1 cucharada de perejil finamente picado
1 cucharadita de estragón finamente picado
Sal y pimienta al gusto
1. Con un cuchillo corte la parte superior de cada pan y retire la miga interna formando un recipiente. Tueste los panes en el horno durante 5 minutos. Reserve.
2. Aparte, condimente la carne con la mostaza y pimienta. Caliente el aceite de oliva en una sartén y sofría la cebolla y el ajo por 2 minutos. Selle la carne en tandas para dorarla en forma pareja, retírela y reserve.
3. Agregue el vino en la sartén aún caliente y raspe el fondo con una cuchara de madera. Cuele y reserve.
4. Para la salsa, en una sartén derrita la mantequilla y fría la cebolla por 3 minutos. Añada los champiñones y saltéelos. Vierta el vino y los jugos de la carne que tenía reservados. Cocine a fuego alto durante 3 minutos o hasta que la salsa se reduzca a la mitad. Baje el fuego y añada la crema de leche. Revuelva hasta que la salsa espese. Por último, agregue las hierbas, sal, pimienta y la carne. Rellene los panecitos con esta mezcla, sirva inmediatamente y acompañe con una ensalada.