1/4 de libra de mantequilla cortada en cubos
1/3 de taza de cebolla cabezona blanca finamente picada
1 1/2 cucharaditas de ajo finamente picado
1 libra de pechuga de pollo sin piel, deshuesada y cortada en cubos medianos
3 libras de hígados de pollo
2 hojas de laurel
1 ramita de tomillo
3/4 de taza de brandy
3/4 de taza de vino blanco
Sal y pimienta al gusto

1. En una sartén grande derrita la mantequilla a fuego medio. Sofría la cebolla y el ajo por 3 minutos. Agregue el pollo y los hígados. Siga cocinando por 3 minutos más. Añada las hojas de laurel y el tomillo y revuelva continuamente por 5 minutos. Luego vierta el brandy y el vino blanco. Cocine a fuego bajo por 15 minutos más. Agregue sal y pimienta.

2. Retire las hojas de laurel y la ramita de tomillo. Ponga la mezcla de hígados y pollo en el procesador. Procese hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Vierta en un molde engrasado ligeramente con aceite de oliva y forrado con papel film. Conserve en refrigeración por 8 horas para que desarrolle sus sabores.

3. Desmolde el paté y sírvalo con pan o galletas.

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Engrase y forre el molde antes de empezar a procesar su paté, para no tener que esperar cuando ya tenga la mezcla. Puede llevar este paté a un paseo junto con un par de mermeladas y unos encurtidos.